LOS REYES SI EXISTEN

En cualquier Centro comercial, por estas fechas, es inevitable encontrarse un espacio donde los responsables del mismo han decidido instalar, con mayor o menor acierto, un rincón donde tres honrados ciudadanos intentan ganarse unos euros, simulando ser esos Reyes Magos que forman parte del imaginario popular.

Y por un momento .....hecho de menos a Santa Claus.

Por lo menos, no lleva corona.

Habría que incluir un apartado  en los planes de educación infantil donde, sin romper la magia de su maravilloso mundo, se explicase que la Historia demuestra que nunca, repito NUNCA, un Rey ha servido para engrandecer o beneficiar a un país. Pero si para enriquecerse el y su Corte.

Su concepto feudalista, claramente demostrado y hábilmente adaptado a la evolución de la sociedad, 

demuestra que nada ha cambiado durante siglos.

El concepto caciquil de una institución basada en el desarrollo de las permanentes oligarquías y de carácter hereditario, independientemente de las nulas cualidades de quién lo ha ostentado u ostenta, debería haber sepultado en el olvido , hace muchos años, esa deformación democrática.

Incluso en los países donde se encuentra vigente, existen elementos de control y transparencia donde, al menos, cada ciudadano es informado de lo que cuesta el mantenimiento de esa obsoleta forma de gobierno.

Aquí.....ni existen....ni se las espera.

Existe todavía un amplísimo colectivo que, arrullado por la complicidad de determinados medios de comunicación y carentes de una adecuada cultura, ojean con deleite publicaciones como HOLA, que se vuelcan permanentemente en disfrazar la realidad, no solo fotográficamente.

Es lamentable escuchar a muchas personas comentar el atractivo físico de Felipe o especular sobre la longitud de los tacones de Letizia o su mayor o menor perdida de peso, mientras sufren las consecuencias de la corrupción, el paro ,las prebendas y negocios de la casta "política" y los escándalos de la Casa Real.

Habra que explicar de una vez a esos niños que los Reyes SI existen.

Y son esos héroes cotidianos que, con enorme esfuerzo y a costa de grandes sacrificios, trabajan duramente todo el año para conseguir dotarles de la mejor educación posible, alimentarles, vestirles e incluso, participar de la mentira colectiva de estas fechas, comprando ese regalo que, espoleados por las  hábiles tácticas consumistas y mediante feroces campañas, les hacen creer ser  indispensables para que sus hijos sean más felices.

Hasta que llegue el momento en que se consiga que en este mundo, solo existan cuatro Reyes:

Los de la baraja.......

Salud y República.