No me salven.
Por favor, no me salven.
Tengo demasiadas canas, demasiados libros leídos, demasiados desengaños, demasiados errores, demasiados fracasos, demasiados caminos recorridos , como para que me salven.
Todos los días me levanto esperando escuchar noticias positivas, creíbles, solidarias, noticias de la verdadera realidad.
Y solo me encuentro el mismo paisaje.
Palabrería, demagogia, populismo, vaguedades, promesas incumplidas, mentiras, amoralidad.
Por favor, no me salven.
A estas alturas de mi vida, solo necesito hechos.
Necesito realidades.
Presente y no futuro.
No necesito salvadores , iluminados, profetas, nuevos libertadores, arribistas o pesebristas del poder.
Necesito ciudadanos.
Con los pies en la tierra, escuchando y presenciando la miseria, las deficiencias, la falta de trabajo, las necesidades de mejoras en los diferentes sectores, la pobreza de los comedores sociales, las dificultades de vivienda digna, los sueldos tercer mundistas de las nuevas generaciones.
Necesito.....calle y no poltrona.
Y todo ello gestionado por los mejores profesionales en cada campo, las mentes brillantes que existen en nuestro país, los más capacitados, los de mayor conciencia social, los de mayor sentido de Estado.
Y , evidentemente, correctamente remunerados pero con los mínimos privilegios. Solo aquellos que estén plenamente justificados para el desarrollo de su función.
Y con transparencia informativa, con cifras reales, con ahorro presupuestario en las diferentes partidas necesarias para hacer funcionar la maquinaria.
Toda una generación ha sufrido las consecuencias de la terrible pandemia, después de toda una vida trabajando y cotizando, para llegar al final de su vida, muertos y abandonados en una cama de hospital, por falta de medios técnicos necesarios, por falta de respiradores o sus equivalentes.
Y mientras se habla de política social, sus familiares solo han podido hacer una cosa.
Llorarles.
Este es solo un ejemplo de los múltiples que podríamos citar en estos últimos tiempos.
Este no es un texto ideológico, no es un texto partidista.
Lo escribiría igual, sea quien sea que ocupe el poder.
Y va dirigido a toda la clase política , aunque en este caso particularmente a quien hoy gobierna.
No me salven.
Gestionen y gobiernen, pensando en nosotros, no en sus ambiciones.
Sean ustedes verdaderos ciudadanos que, voluntariamente , ocupan puestos pagados con nuestros impuestos, para conseguir la mejor cuenta de resultados de esa gran empresa llamada España.
Y recuerden que el Congreso es nuestra cámara de representación y obviamente de discrepancia, pero para buscar soluciones.
No un frente de guerra.
No tengo nada en contra de quien, honestamente, ha decidido dedicar su vida a la política.
Pero, no hagan buena la conocida frase de mi admirado Groucho Marx:
" La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnostico falso y aplicar después los remedios equivocados".
Y recuerden.....no me salven.