martes, 20 de marzo de 2018

FELICIDAD






Sintonizando la radio esta mañana, una amable voz me ha recordado que hoy es el Día Internacional de la Felicidad.
Todavía con la resaca comercial del Día del Padre, he buscado en la web del DRAE, su definición lingüística.
“ Del lat. felicitas-atis
- f. Estado de grata satisfacción espiritual y física.
- f. Persona, situación, objeto o conjunto de ellos que contribuyen a hacer feliz.
- f. Ausencia de inconvenientes o tropiezos.”
Su lectura  me ha provocado unos minutos de reflexión.
¿ Esa situación.....es permanente o puntual? ¿ Mi vida discurre por esos parámetros? ¿ Si no es así, soy una persona infeliz?.¿ Hay que dedicarle un Día especial al año a algo tan indefinible ?.
Muchas preguntas y pocas respuestas.
La aspiración de poder llegar a esa situación idílica , está implícita en el ser humano.
No conozco a nadie que no quiera ser feliz.
Ni tampoco a quién no quiera ser millonario o más guapo, más alto o más joven si , como es mi caso, ya ha alcanzado eso que diplomáticamente se denomina madurez.
¿Donde se compra la felicidad?.
La realidad nos responde, sabiamente, que ese estado de plenitud es temporal. En los casos más extremos , ni siquiera es así.
Las sonrisas de los niños que encontramos en países como la India, que viven en situaciones de subdesarrollo, no parecen transmitir infelicidad. Seguramente porque no son conscientes de sus limitaciones o no han alcanzado el desarrollo suficiente para analizarlas.
¿ Es más feliz un icono como Bill Gates o el que colabora libremente con una ONG?
Aquel que desarrolla toda su vida profesional en un trabajo que aborrece, pero bien remunerado ¿es más feliz que un músico callejero?.
En una sociedad escaparate como la nuestra, ¿ la gente es feliz o....aparenta ser feliz?.
Solo puedo contestar a tantos interrogantes con mi experiencia personal.
Puedo afirmar que he disfrutado de amplios periodos de plenitud tanto personal como profesional que, dentro de su imperfección , se acercaban bastante a esa definición .
Pero, igualmente, ha habido momentos peores donde la vida se ha encargado de recordarte que el paisaje es cambiante y no existe nada definitivo.
De ese aprendizaje procuro manejar mi día a día valorando todo aquello que el mero hecho de existir nos aporta, procurando no hacer daño a nadie, disfrutando de los pequeños pero grandes momentos y rodeandome de personas y entornos positivos. 
Si de manera simplista tuviese que expresar mi propia autodefinición  de la felicidad, lo haría con la siguiente frase:
Ausencia de preocupaciones.
En ello estoy.....felizmente.














miércoles, 7 de marzo de 2018

8 MARZO









La Asociación de Hombres por la Igualdad de Género (AHIGE) apoya la Huelga feminista del próximo 8 de Marzo.
Si eres padre, encárgate de tus hijas e hijos.
Si eres amigo, ofrécete de niñero.
Si eres compañero de trabajo, facilita que tus compañeras vayan a la huelga.
Si eres empresario, no descuentes el día ni tomes represalias.
Si eres estudiante, apoya a tus compañeras acompañándolas en la huelga o facilitándoles los apuntes del día.
Si eres profesor, no pases lista. Recuerda: es una falta justificada y urgente, las alumnas que no están en tu aula están en la calle gritando: “si nosotras paramos, se para el mundo”.
Si en tu familia hay una persona dependiente y es una mujer quien la cuida, mañana es un buen día para que empieces a hacerlo tú (y no te limites al próximo 8 de marzo), el año tiene 365 días y quien necesita cuidados los requiere todos y cada uno de ellos.
Si vives con una mujer, asume las tareas domésticas y reparte equitativamente las mismas todo el año.
Si tienes una relación afectiva con una mujer, facilita que ella pueda participar en la huelga y en las manifestaciones.
Si trabajas en un medio de comunicación, difunde la convocatoria de huelga y todas las acciones que ellas organicen.
Si eres un hombre que estás por la igualdad, difunde el evento entre tus conocidos y divúlgalo en las redes sociales.
Si vas a una manifestación o concentración porque ellas no necesitan que estés en las tareas anteriores, escucha, no te pongas delante, no des órdenes ni lideres las actividades, simplemente acompaña”.